¿Conoces la magia de la madera viva en las tarimas que fabricamos?
El hecho de contar con ellas hace que se precisen de unos cuidados y un mantenimiento concretos.
En estos casos hay que tener muy presente las diferentes temperaturas a las que trabajar con este producto.
Hay cuidados que entran dentro de la lógica desde el mismo momento de la instalación de los suelos laminados, que la luz no incida de forma directa, que no haya exceso de humedad en sus superficies o que se aireen de vez en cuando, por ejemplo.
Para mantener al máximo la salud de tus tarimas hay que cuidar mucho que la suciedad no se filtre en la madera, para lo que se recomienda utilizar el aspirador y no artilugios que rayen la superficie.
La limpieza de las tarimas se debe realizar con una fregona húmeda y con productos suaves para evitar la abrasión y que el brillo se difumine.
¿Quieres que tu tarima esté perfecta?
En esto también influye la instalación que se haya realizado, que podría ser mediante sistema flotante o también incluyendo suelo radiante por rastrel químico o velo de pegamento.
En ambos casos, es importante partir de una solera bien seca y limpia que disponga de aislante térmico, hídrico y acústico.
Será la mejor manera de asegurar la máxima eficiencia del suelo de tu tarima.
¿Te atreves con los suelos laminados?
Deja que los instalemos a la perfección, y tú los mantienes sin ningún esfuerzo.
Cómo instalar suelo laminado: consejos de instalación, mantenimiento y limpieza de suelos de tarima de madera
Los suelos de tarima de madera que fabricamos están hechos con madera viva y como tal requiere de ciertos cuidados y cierto mantenimiento.
La temperatura ideal para los suelos de tarima de madera debe mantenerse entre los 18 y los 24ºC, con una humedad en la habitación comprendida entre el 45 y el 60%.
Para alcanzar el máximo rendimiento en el mantenimiento de los suelos de tarima de madera conviene que siempre se encuentren aireadas, de forma que en viviendas deshabitadas se acertará dejando una pequeña entrada de aire.
Otra medida importante para conseguir estos objetivos, es el hecho de evitar grandes condensaciones de humedad en las viviendas, así como que el sol incida de forma directa en ellas.
Especificaciones de la instalación de suelos de tarima de madera
El control del nivel de humedad en el lugar donde se instale el suelo de tarima, y es muy importante para que la instalación quede perfecta.
Se puede llevar a cabo la instalación por medio de sistema flotante y en este caso se debe partir de una solera nivelada, seca y limpia, al mismo tiempo que se dispondrá de material aislante térmico, acústico y de humedad para una mayor eficiencia del suelo de tarima.
En cuanto a la instalación de suelo radiante, se realiza por un sistema de rastrel químico o por velo de pegamento completo.
La temperatura de la solera, en este caso, no debe superar los 25/ 26ºC de temperatura, de forma que la superficie de las tablas debe ser alrededor de 24ºC.
Limpieza y mantenimiento de los suelos de tarima de madera
Es importante que la suciedad no se filtre a la madera, y que si existiese alguna partícula se utilice el aspirador para no arrastrar el polvo, ya que podría lijar la tarima.
En cuanto a las manchas es importante pasar una fregona húmeda, evitando en cualquier momento el exceso de humedad, así como utilizar productos suaves para las superficies, evitando la abrasión y la eliminación del brillo de la propia tarima de madera.